Apantalla la lucidez del inquilino de Los Pinos. Con un solo toque de micrófono todo lo resuelve, da en el clavo y transmite serenidad a los mexicanos, a quienes pide que no se aceleren, que no exageren, porque los problemas del país (que algunos creen que lo ahogan) no son reales sino, simple y sencillamente, de percepción. Deslumbrante hallazgo, sin duda. De haberlo sabido, cuántas angustias se hubieran ahorrado los habitantes de esta nación, cuántos muertos permanecerían vivos, cuántos pobres ocuparían los empleos que supuestamente se perdieron por miles y millones más no fueron generados, cuántos puntos del producto interno bruto no hubieran terminado en la basura si la creencia popular no insistiera en que la crisis alcanzó proporciones descomunales, cuántas otras cosas, en fin, se hubieran ahorrado.
Que la corrupción alcanza niveles históricos es una mera percepción; que el narco hace y deshace a discreción, que es alarmante la inseguridad, que la llamada "estrategia" gubernamental de plano no sirve, que ya son más de 30 mil muertos y que los gringos a Calderón le toman el pelo todos los días, lo mismo; que la caída económica fue la más drástica en ocho décadas, que el desarrollo brilla por su ausencia, que la pobreza va en caballo de hacienda y que la supuesta "recuperación" no alcanza para tapar el cráter de 2009, igual, y así por el estilo en el tema que se aborde. Todo es percepción de quienes, carentes de la brillantez del inquilino de Los Pinos, no tienen la menor idea de lo que en realidad acontece en México, por mucho que obligada y cotidianamente deban cargar con este tremendo paquete que, dicho sea de paso, en el México feliz y vigoroso de la residencia oficial ni de lejos existe.
Cotidianamente los mexicanos perciben que el horno no está para bollos; de hecho no tienen para gas ni para bollos, pero el inquilino de Los Pinos agarra el micrófono y los tranquiliza de inmediato, con esa psicología aplicada que lo caracteriza (se respeta sintaxis, que este tecleador percibe un tanto fuera de norma): "de acuerdo con los datos económicos y entonces se vislumbraba una luz al final del túnel, los datos económicos hoy nos demuestran que, efectivamente, México ha salido del periodo recesivo y tiene datos en materia económica que confirman que no sólo se ve la luz, sino que ya salimos, digamos, de esa parte del túnel, a pesar de que en la percepción de los consumidores y agentes económicos seguimos viviendo en una crisis que para algunos es prácticamente imposible salir de ella" (pieza oratoria de colección en la Cumbre de Negocios México 2010, 25 de octubre).
La mayoría de los mexicanos percibe que se los está llevando el carajo, pero no es así. Como bien dijo el susodicho ante los empresarios reunidos en la capital mexiquense, eso es mera percepción, porque lo realmente sólido es aquello de la luz, el túnel, los datos y todas esas cosas que los jodidos de plano no alcanza a ver por ser extremadamente negativos y masoquistas, por aferrarse a esa deplorable condición de vida que mantienen, y con una actitud así, pues ni para cuándo saldrán del hoyo.
El inquilino de Los Pinos es generoso, y entiende que no todos los mexicanos tuvieron el privilegio de escuchar su sesión de micrófono abierto del pasado día 25. Por ello, ayer repitió el ejercicio, con igual calidad de sintaxis, aunque lamentablemente dejó fuera aquello del túnel y la luz. Ante los empresarios exportadores dijo así: "después de una de las peores crisis económicas de la historia, la economía mexicana está viviendo datos de franca recuperación, y no debemos perderlo de vista. Yo sé que para mucha gente, quizá, ensimismada en cierto desaliento, en cierto desánimo para algunos sectores, para algunos mexicanos la crisis sigue, incluso para otros estamos en lo peor de la crisis, y para otros más no hay salida para ellos (sin duda, éstos últimos son los que perciben que la cosa está color de hormiga), pero la verdad es que los datos reflejan una realidad distinta que es importante dar a conocer. Hoy estamos recuperando la ruta del crecimiento".
Como se constata, la mayoría de los mexicanos percibe que el inquilino de Los Pinos no tiene la menor idea de lo que pasa en el país; percibe que lo que él llama "crecimiento" no es otra que el raquitismo que registra la economía nacional desde hace tres décadas; percibe que el autodenominado gobierno no tiene pies ni cabeza; percibe que lo que urge no es un psicólogo de micrófono, sino un gobernante que resuelva los problemas nacionales, no que los justifique y percibe, en fin, que sin un cambio de fondo el país va directo al precipicio.
El que de plano tampoco percibe bien las cosas es el afamado doctor "catarrito", el mismísimo Agustín Carstens –hoy en funciones de gobernador del Banco de México–, para quien 2011 no será un año del todo grato (léase fuera del túnel y con foquitos de colores), pues adelanta que la economía mexicana (la misma que según Calderón se encuentra en "franca recuperación") de nuevo entrará en lo que llamó "fase de desaceleración", la cual “puede ser más severa en la medida en que el freno a la actividad económica mundial sea mayor; las tasas de crecimiento bajas en Estados Unidos se mantendrán por bastantes años, por lo cual se hace necesario detonar fuentes internas de crecimiento (¡por fin lo descubrió!), como en la industria de la construcción y la minería… Sí existe el riesgo de mayor desaceleración de la economía mundial y eso nos podría afectar. En México los indicadores oportunos disponibles sugieren que durante el tercer trimestre del año se observó una moderación ligera en el ritmo de expansión de la economía mexicana (lo contrario de lo que sostiene el inquilino de Los Pinos), como resultado tanto de una menor tasa de crecimiento de la demanda externa, como de la falta de consolidación en la recuperación de la interna” (La Jornada, Juan Antonio Zúñiga).
Según sus cálculos, la economía mexicana "avanzará" 3.2 por ciento en 2011, lo que hace percibir que el calderonato confirmará su logró: el peor resultado económico desde tiempos de Miguel de la Madrid, con una tasa promedio anual de "crecimiento" de 1.24 por ciento en un quinquenio.
Pero no se preocupen, que sólo es percepción.
No alcanza el sistema nervioso ni los ácidos estomacales para digerir una matanza, cuando está encima otra, y otra, y otra, mientras el del sicólogo de micrófono habla de lo que los mexicanos perciben.
sábado, 30 de octubre de 2010
martes, 26 de octubre de 2010
Parar al p.r.i......¿Con el p.a.n.?.
Quienes sostienen la utilidad "práctica" de las alianzas aducen que se justifican porque son la única manera de frenar al antiguo partido oficial, que, sin corregirse de sus arraigados vicios, pretende volver al poder en 2012.
Ponen de ejemplo de eficacia, los casos de Puebla, Sinaloa y Oaxaca, en los que una alianza de los partidos de izquierda con el partido de las derechas, así en plural, logró, al menos en apariencia, derrotar al priísmo. En un caso, en el de Oaxaca, es muy probable que el candidato y hoy gobernador electo, Gabino Cué, hubiera ganado sin necesidad de alianza, tan sólo apoyado por la gente y por el hartazgo de la dictadura, imposible de seguir soportándose, de Ulises Ruiz.
Algunos opositores de izquierda o simpatizantes de ella quieren frenar al PRI usando, así lo piensan ellos, al PAN como ariete, sin darse cuenta de que los usados son ellos. Supongamos que alianzas en otras entidades, el estado de México, entre ellas fuera la única posible fórmula para que el Santa Anna del siglo XXI, el PRI, conserve el poder; piensan que el heredero de su tío Montiel, que cuenta con el apoyo de la televisión, no puede ser derrotado si no se unen todos los partidos en su contra. Pudiera ser, aunque no es seguro a estas alturas, que la alianza triunfara, pero su propuesta necesariamente contradictoria la hace inviable y tampoco el heredero de Peña Nieto podrá derrotar fácilmente a la izquierda, por la carga negativa que traerá en su contra, por el desorden en el estado y por las innumerables injusticias que todos los días se cometen en esa entidad.
Pero, aun en el supuesto de la posible eficacia de las alianzas, quienes las proponen deben considerar algo más: no pueden olvidar cómo el patético personaje que es Fox logró desplazar del Poder Ejecutivo al PRI, sólo para repetir corregidas y aumentadas las corruptelas y los errores del sistema anterior; el cambio fue sólo de fachada y no de fondo.
La historia debe ser maestra; Iturbide logró la separación de España, que no habían podido alcanzar los limpios insurgentes que siguieron a Hidalgo y a Morelos, pero no pudo o no quiso cambiar las estructuras injustas y discriminatorias del virreinato; si Bernardo Reyes o alguno de los científicos que constituían la corte de don Porfirio hubieren llegado al poder, no habrían tampoco cambiado nada, porque eran de los mismos, como no hubo un cambio cuando Victoriano Huerta, general porfirista, llegó al poder sobre el cadáver de Madero y lo único que hizo fue dar continuidad al sistema de su antiguo jefe.
Con triunfos electorales o con cambios de políticos de la misma catadura, o muy semejantes a los sustituidos, no se trastocan los mecanismos de control y no se mueve un ápice la pirámide social, en la que unos pocos, "la mafia", como los ha bautizado AMLO, ocupan la puntiaguda cumbre de la pirámide y una gran base de pobreza y marginación continúa ensanchándose abajo. Los "grandes maquiavelistas", como los llamó Maritain, no buscan el poder para beneficiar a los gobernados lo buscan para provecho propio y para su defensa en el futuro y en esas intenciones y en esos fines, coinciden PRI y PAN.
Hace unos meses dije que los yuppies del Verde Ecologista y los jóvenes muy bien peinados del PAN, eran intercambiables; hoy podemos agregar que esos yuppies, ya maduritos, siguen siendo intercambiables, pero el espectro se ha ensanchado, ahora podemos incluir a muchos priístas y a los perredistas que son dueños de las estructuras de su partido.
¿Con esos personajes pretende la izquierda desorientada frenar al PRI? Por supuesto que la receta está destinada al fracaso, porque aun cuando lograran el cambio de elites o de emblemas en el poder, no habrán logrado el cambio democrático de las estructuras injustas.
La izquierda, del brazo del PAN, ha perdido la memoria; el PAN y el PRI, el PRIAN, como lo bautizó Manú Dornbierer, es una expresión bicéfala de la misma clase política, que sólo se divide, para efectos prácticos, en dos partidos que simulan enfrentarse o que incluso, a veces, se enfrentan realmente, pero no para un cambio de fondo, sino tan sólo para modificar las apariencias: "Quítate tú del poder, de los contratos, de los sobornos, para ponerme yo; ya te volverá a tocar".
Un verdadero cambio, patriótico, popular, republicano que sacuda verdaderamente a la sociedad desde sus cimientos, que rescate al país y atiendan a los ciudadanos, es otra cosa y requiere mucho más que cabildeos, acuerdos cupulares y matrimonios de conveniencia. Requiere la participación organizada de todos; como dice el lema del "gobierno legítimo": sólo el pueblo salva al pueblo.
Ponen de ejemplo de eficacia, los casos de Puebla, Sinaloa y Oaxaca, en los que una alianza de los partidos de izquierda con el partido de las derechas, así en plural, logró, al menos en apariencia, derrotar al priísmo. En un caso, en el de Oaxaca, es muy probable que el candidato y hoy gobernador electo, Gabino Cué, hubiera ganado sin necesidad de alianza, tan sólo apoyado por la gente y por el hartazgo de la dictadura, imposible de seguir soportándose, de Ulises Ruiz.
Algunos opositores de izquierda o simpatizantes de ella quieren frenar al PRI usando, así lo piensan ellos, al PAN como ariete, sin darse cuenta de que los usados son ellos. Supongamos que alianzas en otras entidades, el estado de México, entre ellas fuera la única posible fórmula para que el Santa Anna del siglo XXI, el PRI, conserve el poder; piensan que el heredero de su tío Montiel, que cuenta con el apoyo de la televisión, no puede ser derrotado si no se unen todos los partidos en su contra. Pudiera ser, aunque no es seguro a estas alturas, que la alianza triunfara, pero su propuesta necesariamente contradictoria la hace inviable y tampoco el heredero de Peña Nieto podrá derrotar fácilmente a la izquierda, por la carga negativa que traerá en su contra, por el desorden en el estado y por las innumerables injusticias que todos los días se cometen en esa entidad.
Pero, aun en el supuesto de la posible eficacia de las alianzas, quienes las proponen deben considerar algo más: no pueden olvidar cómo el patético personaje que es Fox logró desplazar del Poder Ejecutivo al PRI, sólo para repetir corregidas y aumentadas las corruptelas y los errores del sistema anterior; el cambio fue sólo de fachada y no de fondo.
La historia debe ser maestra; Iturbide logró la separación de España, que no habían podido alcanzar los limpios insurgentes que siguieron a Hidalgo y a Morelos, pero no pudo o no quiso cambiar las estructuras injustas y discriminatorias del virreinato; si Bernardo Reyes o alguno de los científicos que constituían la corte de don Porfirio hubieren llegado al poder, no habrían tampoco cambiado nada, porque eran de los mismos, como no hubo un cambio cuando Victoriano Huerta, general porfirista, llegó al poder sobre el cadáver de Madero y lo único que hizo fue dar continuidad al sistema de su antiguo jefe.
Con triunfos electorales o con cambios de políticos de la misma catadura, o muy semejantes a los sustituidos, no se trastocan los mecanismos de control y no se mueve un ápice la pirámide social, en la que unos pocos, "la mafia", como los ha bautizado AMLO, ocupan la puntiaguda cumbre de la pirámide y una gran base de pobreza y marginación continúa ensanchándose abajo. Los "grandes maquiavelistas", como los llamó Maritain, no buscan el poder para beneficiar a los gobernados lo buscan para provecho propio y para su defensa en el futuro y en esas intenciones y en esos fines, coinciden PRI y PAN.
Hace unos meses dije que los yuppies del Verde Ecologista y los jóvenes muy bien peinados del PAN, eran intercambiables; hoy podemos agregar que esos yuppies, ya maduritos, siguen siendo intercambiables, pero el espectro se ha ensanchado, ahora podemos incluir a muchos priístas y a los perredistas que son dueños de las estructuras de su partido.
¿Con esos personajes pretende la izquierda desorientada frenar al PRI? Por supuesto que la receta está destinada al fracaso, porque aun cuando lograran el cambio de elites o de emblemas en el poder, no habrán logrado el cambio democrático de las estructuras injustas.
La izquierda, del brazo del PAN, ha perdido la memoria; el PAN y el PRI, el PRIAN, como lo bautizó Manú Dornbierer, es una expresión bicéfala de la misma clase política, que sólo se divide, para efectos prácticos, en dos partidos que simulan enfrentarse o que incluso, a veces, se enfrentan realmente, pero no para un cambio de fondo, sino tan sólo para modificar las apariencias: "Quítate tú del poder, de los contratos, de los sobornos, para ponerme yo; ya te volverá a tocar".
Un verdadero cambio, patriótico, popular, republicano que sacuda verdaderamente a la sociedad desde sus cimientos, que rescate al país y atiendan a los ciudadanos, es otra cosa y requiere mucho más que cabildeos, acuerdos cupulares y matrimonios de conveniencia. Requiere la participación organizada de todos; como dice el lema del "gobierno legítimo": sólo el pueblo salva al pueblo.
sábado, 23 de octubre de 2010
Chicos del boton dorado.
El diputado priísta Francisco Rojas estaba muy molesto. Tres cosas le amargaban el día: la violencia, la falta de respeto a la legalidad y los pobrecitos derechohabientes que podrían quedarse sin sus medicinas. Los causantes de su enojo eran los miembros de PRD y PT que mediante ocupación de la tribuna y presión física habían impedido que se cumpliera uno de los compromisos bajo el agua que con el Partido Verde Dolarista se habían negociado a cambio de apoyos electorales (y maniobras como la presentación de la propuesta en el estado de México contra las alianzas de partidos, para que el tricolor no se manchara las manos).
Círculo perfecto de corrupción de cuello blanco o, más bien, de dorado botón legislativo en la solapa del traje: los chicos del botón dorado. El negocio familiar de los González (Jorge González Torres fue el fundador, y Jorge Emilio González Martínez, el niño verde, es el actual senador gerente), conocido por sus siglas, PVEM, que nada significan en términos ecologistas pero sí mercantiles, había conseguido en cambalache con el PRI que le aprobaran una suculenta vía de triangulación de recursos: cuando no hubiera medicina en los estantes del Seguro Social –lo que sucede todos los días en todo el país– se libraría un expedito vale para que las sustancias recetadas fueran surtidas en alguna empresa circunstancialmente autorizada para hacer negocio privado con las carencias públicas: sí, en las multiplicadas farmacias del tío Víctor González Torres, el famoso doctor Simi y sus habilitaciones genéricas de dudosa eficacia pero aplastante publicidad. Negocio en familia, sin mucho riesgo de que el Niño Verde Dólar fuera captado en algún video indiscreto como sucedió en 2004, cuando fue pillado negociando la entrega de 2 millones de dólares a cambio de influir para que se otorgara un permiso turístico en Cancún.
Al contador público Rojas mucho le molestó que una minoría de izquierdistas reprodujera en la cámara de diputados una ínfima parte de la violencia social que la mayoría de esos legisladores dorados provoca en las calles y las familias mexicanas con sus tretas "legales" de blanqueo congresista de dinero. La preocupación no era la inaceptable insuficiencia del Seguro Social, su manejo deplorable y el desabasto que no debería existir, sino el asunto de los simivales. Un boletín de prensa del grupo parlamentario priísta tenía como título: “La toma de la tribuna por el PRD es un crimen contra la salud de los mexicanos”. Bueno, más bien, para las cuentas bancarias de la familia González: del tío Víctor y el sobrino Niño Verde, y para los arreglos políticos del PRI con el PVEM a cuya cuenta se había acordado el pago en especie: lo mismo, pero (no) más barato. La sesión que debía aprobar los acuerdos genéricos fue suspendida por falta de quórum pero, sobre todo, por exceso de protestas: Agustín Guerrero, de la franja lopezobradorista de la bancada del sol azteca, fue uno de quienes obstruyeron la continuidad del proceso legislativo que intentaba el presidente de la mesa directiva, el priísta Jorge Carlos Ramírez Marín. Al final, suspendida la aprobación prometida, pendiente el desenlace para este martes próximo en que la aplanadora de tres colores demostrará su violencia numérica, seguía muy enojado el diputado Rojas, quien fue secretario de la contraloría con Miguel de la Madrid, director de Pemex con Carlos Salinas (su hermano, Carlos, fue secretario de desarrollo social) y ahora coordina la bancada priísta en San Lázaro en nombre de ese mismo jefe máximo que prepara un retorno copetón a Los Pinos: el simisalinismo.
En otro flanco de la expansión gastronómica salinista, el Instituto Federal Electoral (tal es su denominación de origen), todo se alistaba para dejar sin sanción al ciudadano Andrés Manuel López Obrador, pues a nadie se le puede acusar de actos adelantados de campaña si no ha sido designado formalmente como candidato a nada. En cambio, como una especie de compensación menor, se propondrá que el consejo general del IFE apruebe una sanción económica al Partido del Trabajo por difundir promocionales en los que se estaría causando daño a la figura de quien ocupa la Presidencia del país. Los proyectos de dictámenes se discutirán hoy, pero todo apunta a que la torpe maquinaria de organización electoral dará marcha atrás en su intento de microdesafuero mediático, si acaso intentando un castigo pecuniario al partido involucrado.
El Sindicato Mexicano de Electricistas, sin embargo, sí fue alcanzado por la mano dura, tan ansiosa como está de meter "orden" y aplicar castigos ejemplares. El país tomado por delincuentes impunes, pero fuerzas federales se aplican en táctica y número a detener en Puebla a Miguel Márquez, un integrante de la directiva de la organización en resistencia, luego de un mitin. José Antonio Almazán y Cecilia Figueroa explicaron a esta columna: "Pesan sobre Márquez acusaciones de privación ilegal de la libertad agravada contra el consumo y la riqueza nacionales, resistencia de particulares y daño en propiedad ajena que, como es sabido, son las acusaciones con las que hoy el gobierno de Calderón criminaliza las luchas sociales. No debería extrañarnos. Sobre el SME pesan cientos de averiguaciones previas, con las que el gobierno ha buscado contener y desarticular un año de resistencia en contra de la privatización en curso de la industria eléctrica en el centro del país y la entrega regalada de la fibra óptica de Luz y Fuerza del Centro a las grandes empresas trasnacionales".
Y, mientras un comandante pinolero se encamina a ganar de manera aplastante el concurso nacional de calaveras, con 30 mil creaciones, y en tanto sigue la telenovela narcopolítica con el actor Godoy, ¡feliz fin de semana, con un miembro de la Guardia Nacional de Texas asesinado en Ciudad Juárez, lo que podría crear más problemas al calderonismo que las decenas de miles de mexicanos caídos!
Círculo perfecto de corrupción de cuello blanco o, más bien, de dorado botón legislativo en la solapa del traje: los chicos del botón dorado. El negocio familiar de los González (Jorge González Torres fue el fundador, y Jorge Emilio González Martínez, el niño verde, es el actual senador gerente), conocido por sus siglas, PVEM, que nada significan en términos ecologistas pero sí mercantiles, había conseguido en cambalache con el PRI que le aprobaran una suculenta vía de triangulación de recursos: cuando no hubiera medicina en los estantes del Seguro Social –lo que sucede todos los días en todo el país– se libraría un expedito vale para que las sustancias recetadas fueran surtidas en alguna empresa circunstancialmente autorizada para hacer negocio privado con las carencias públicas: sí, en las multiplicadas farmacias del tío Víctor González Torres, el famoso doctor Simi y sus habilitaciones genéricas de dudosa eficacia pero aplastante publicidad. Negocio en familia, sin mucho riesgo de que el Niño Verde Dólar fuera captado en algún video indiscreto como sucedió en 2004, cuando fue pillado negociando la entrega de 2 millones de dólares a cambio de influir para que se otorgara un permiso turístico en Cancún.
Al contador público Rojas mucho le molestó que una minoría de izquierdistas reprodujera en la cámara de diputados una ínfima parte de la violencia social que la mayoría de esos legisladores dorados provoca en las calles y las familias mexicanas con sus tretas "legales" de blanqueo congresista de dinero. La preocupación no era la inaceptable insuficiencia del Seguro Social, su manejo deplorable y el desabasto que no debería existir, sino el asunto de los simivales. Un boletín de prensa del grupo parlamentario priísta tenía como título: “La toma de la tribuna por el PRD es un crimen contra la salud de los mexicanos”. Bueno, más bien, para las cuentas bancarias de la familia González: del tío Víctor y el sobrino Niño Verde, y para los arreglos políticos del PRI con el PVEM a cuya cuenta se había acordado el pago en especie: lo mismo, pero (no) más barato. La sesión que debía aprobar los acuerdos genéricos fue suspendida por falta de quórum pero, sobre todo, por exceso de protestas: Agustín Guerrero, de la franja lopezobradorista de la bancada del sol azteca, fue uno de quienes obstruyeron la continuidad del proceso legislativo que intentaba el presidente de la mesa directiva, el priísta Jorge Carlos Ramírez Marín. Al final, suspendida la aprobación prometida, pendiente el desenlace para este martes próximo en que la aplanadora de tres colores demostrará su violencia numérica, seguía muy enojado el diputado Rojas, quien fue secretario de la contraloría con Miguel de la Madrid, director de Pemex con Carlos Salinas (su hermano, Carlos, fue secretario de desarrollo social) y ahora coordina la bancada priísta en San Lázaro en nombre de ese mismo jefe máximo que prepara un retorno copetón a Los Pinos: el simisalinismo.
En otro flanco de la expansión gastronómica salinista, el Instituto Federal Electoral (tal es su denominación de origen), todo se alistaba para dejar sin sanción al ciudadano Andrés Manuel López Obrador, pues a nadie se le puede acusar de actos adelantados de campaña si no ha sido designado formalmente como candidato a nada. En cambio, como una especie de compensación menor, se propondrá que el consejo general del IFE apruebe una sanción económica al Partido del Trabajo por difundir promocionales en los que se estaría causando daño a la figura de quien ocupa la Presidencia del país. Los proyectos de dictámenes se discutirán hoy, pero todo apunta a que la torpe maquinaria de organización electoral dará marcha atrás en su intento de microdesafuero mediático, si acaso intentando un castigo pecuniario al partido involucrado.
El Sindicato Mexicano de Electricistas, sin embargo, sí fue alcanzado por la mano dura, tan ansiosa como está de meter "orden" y aplicar castigos ejemplares. El país tomado por delincuentes impunes, pero fuerzas federales se aplican en táctica y número a detener en Puebla a Miguel Márquez, un integrante de la directiva de la organización en resistencia, luego de un mitin. José Antonio Almazán y Cecilia Figueroa explicaron a esta columna: "Pesan sobre Márquez acusaciones de privación ilegal de la libertad agravada contra el consumo y la riqueza nacionales, resistencia de particulares y daño en propiedad ajena que, como es sabido, son las acusaciones con las que hoy el gobierno de Calderón criminaliza las luchas sociales. No debería extrañarnos. Sobre el SME pesan cientos de averiguaciones previas, con las que el gobierno ha buscado contener y desarticular un año de resistencia en contra de la privatización en curso de la industria eléctrica en el centro del país y la entrega regalada de la fibra óptica de Luz y Fuerza del Centro a las grandes empresas trasnacionales".
Y, mientras un comandante pinolero se encamina a ganar de manera aplastante el concurso nacional de calaveras, con 30 mil creaciones, y en tanto sigue la telenovela narcopolítica con el actor Godoy, ¡feliz fin de semana, con un miembro de la Guardia Nacional de Texas asesinado en Ciudad Juárez, lo que podría crear más problemas al calderonismo que las decenas de miles de mexicanos caídos!
jueves, 21 de octubre de 2010
Paraiso Fiscal Garantizado.
Apenas unos meses atrás la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) describió a México como un paraíso fiscal de facto, aunque oficialmente no esté incluido en el catálogo internacional de edenes libres de gravámenes y/o facilitadores de evasión y elusión en el pago de impuestos. Tan preciso calificativo fue utilizado por la secretaria ejecutiva del citado organismo regional, Alicia Bárcenas, el cual, desde luego, provocó una grosera reacción hepática de quienes dicen ser los responsables de que "todos, equitativamente, paguen los impuestos que les corresponden, en beneficio del desarrollo nacional" (no hay que esforzarse para saber quién es el autor de tan emotiva frase).
Pues bien, la señora Bárcenas no inventó nada: se limitó a describir lo que cotidianamente se constata, lo que fácilmente se documenta y lo que año tras año se confirma a la hora de armar la ley de ingresos y "distribuir" la carga fiscal entre los mexicanos, es decir, lo que puntualmente hicieron ayer los ágiles "representantes populares" avecindados en San Lázaro quienes, de la mano del inquilino de Los Pinos, ratificaron que, en efecto, México es un paraíso fiscal. Como cada octubre, con los dedos en la puerta y a toda prisa, la Comisión de Hacienda dictaminó la ley de ingresos para 2011, y más rápido aún la presentarían al pleno de la Cámara de Diputados para su aprobación, a escasas horas de vencer el plazo para tal efecto.
Son tan creativos los inquilinos de San Lázaro, que igual se comprometen a reducir la tasa del IVA o la del ISR, "porque es necesario cuidar el interés nacional y el bolsillo de la mayoría", que a mantenerlas sin modificación alguna, o de plano incrementarlas, por la misma causa, toda vez que "las condiciones cambiaron" (léase los gobernadores dieron línea y ya viene la campaña). En cambio, a la hora de revisar los abominables privilegios fiscales otorgados al gran capital o de cerrar las no pocas rutas legales para evadir y eludir el pago de impuestos (que han hecho del fisco un verdadero queso gruyere), se produce el milagro: automáticamente, todos los diputados quedan sordos, mudos, ciegos y paralíticos. Ni el más mínimo intento por erradicar dichas prácticas, por equilibrar la carga fiscal, por democratizar el pago de impuestos. Ni por aproximación.
A mediados de año, durante el seminario Igualdad y desarrollo en México, organizado por la Cepal y la UNAM, la señora Bárcenas advirtió que en materia impositiva existe "gran evasión y gran cantidad de exenciones que hacen que el país esté por debajo de los niveles de recaudación de la región", por lo que "es necesario comprometernos para un nuevo pacto social para aumentar la recaudación". Dicho pacto "debe procurar una estructura y una carga tributaria con mayor impacto redistributivo, uso eficiente, eficaz, transparente, sujeto a rendición de cuentas, y un Estado donde a través de la política pública se pueda garantizar un umbral de bienestar. Cuando digo que hay un paraíso fiscal de facto es porque México es un país que tributa muy poco. La carga tributaria no se eleva más allá de 11 por ciento, y por lo tanto es una carga tributaria todavía baja. En general, en la región es de 18 por ciento y México está por debajo del promedio. Por lo tanto, creemos que es importante revisar la estructura; debe haber un pacto entre todos los actores económicos, sociales y políticos para alcanzar un nivel de recaudación que sea el que se requiere para tener un Estado fuerte, que pueda otorgar los bienes públicos que la ciudadanía demanda; son vulnerabilidades estructurales que se tienen que vencer y resolver".
El diagnóstico de la secretaria ejecutiva de la Cepal es exacto, y describe una de las causas del permanente raquitismo de las finanzas públicas y, consecuentemente, de las de millones de mexicanos. Anualmente la Secretaría de Hacienda (léase el inquilino de Los Pinos en turno) presenta su presupuesto de gastos fiscales (quiénes y en qué proporción evadirán legalmente los impuestos en el periodo), y un poco más adelante su propuesta de ley de ingresos (a quiénes y en qué proporción pasarán fiscalmente a cuchillo), uno y otra siempre amenazadas por los merolicos de San Lázaro, pero nunca modificadas, porque "las condiciones cambiaron".
Un ejemplo ilustrativo del citado paraíso (documentado en este espacio en entregas anteriores): en la revisión de la Cuenta Pública 2005 (cuyo resultado se divulgó en 2007) la Auditoría Superior de la Federación detectó multimillonarias irregularidades en el otorgamiento de créditos fiscales por el gobierno foxista (cerca de 500 mil millones de pesos que no ingresaron a las arcas nacionales, producto de la enorme telaraña de amistades y complicidades entre "servidores públicos" de primer nivel y el gran capital). Enterado del asalto, el nuevo inquilino de Los Pinos ordenó "adoptar de inmediato las acciones necesarias para solventar" tan nefasta situación. La respuesta inmediata del gobierno federal, por medio de la Secretaría de Hacienda, fue publicar un acuerdo (JG-SAT-IE-3-2007) en el Diario Oficial de la Federación, para condonar "total o parcialmente" dichos créditos fiscales (casi medio billón de pesos), ergo, borrarlos de los pendientes.
¿Quiénes fueron los beneficiarios de la magnanimidad foxista y de la decidida acción calderonista, es decir, del otorgamiento y la cancelación de créditos fiscales? Sólo grandes contribuyentes. La ASF no dio nombres, pero en el registro entre otros aparecieron bancos trasnacionales, 11 ingenios azucareros, 14 consorcios de la construcción, dos televisoras, cuatro clubes de futbol, dos empresas de transporte, una empresa editorial y un partido político. La cereza de todo esto la aporta la propia Auditoría Superior de la Federación: "se detectaron contribuyentes con créditos fiscales en 2005 que obtuvieron devoluciones de impuestos por parte del SAT en el mismo año".
Entonces, no es difícil entender por qué todos los años la dupla gobierno-Congreso clava un puñal adicional a los contribuyentes cautivos; por qué aumenta y/o inventa impuestos; por qué exprime a los de siempre, con los resultados de siempre, y por qué no puede bajar la tasa del IVA. Porque los barones necesitan más cortesías.
Agárrense de donde puedan, mexicanos pasivos y pagadores, que ya viene la "actualización" (léase aumento) de los precios y tarifas del sector público, la que a su vez automáticamente provoca la "actualización" de los precios y tarifas del sector privado (el paquete no incluye "actualizaciones" salariales).
Pues bien, la señora Bárcenas no inventó nada: se limitó a describir lo que cotidianamente se constata, lo que fácilmente se documenta y lo que año tras año se confirma a la hora de armar la ley de ingresos y "distribuir" la carga fiscal entre los mexicanos, es decir, lo que puntualmente hicieron ayer los ágiles "representantes populares" avecindados en San Lázaro quienes, de la mano del inquilino de Los Pinos, ratificaron que, en efecto, México es un paraíso fiscal. Como cada octubre, con los dedos en la puerta y a toda prisa, la Comisión de Hacienda dictaminó la ley de ingresos para 2011, y más rápido aún la presentarían al pleno de la Cámara de Diputados para su aprobación, a escasas horas de vencer el plazo para tal efecto.
Son tan creativos los inquilinos de San Lázaro, que igual se comprometen a reducir la tasa del IVA o la del ISR, "porque es necesario cuidar el interés nacional y el bolsillo de la mayoría", que a mantenerlas sin modificación alguna, o de plano incrementarlas, por la misma causa, toda vez que "las condiciones cambiaron" (léase los gobernadores dieron línea y ya viene la campaña). En cambio, a la hora de revisar los abominables privilegios fiscales otorgados al gran capital o de cerrar las no pocas rutas legales para evadir y eludir el pago de impuestos (que han hecho del fisco un verdadero queso gruyere), se produce el milagro: automáticamente, todos los diputados quedan sordos, mudos, ciegos y paralíticos. Ni el más mínimo intento por erradicar dichas prácticas, por equilibrar la carga fiscal, por democratizar el pago de impuestos. Ni por aproximación.
A mediados de año, durante el seminario Igualdad y desarrollo en México, organizado por la Cepal y la UNAM, la señora Bárcenas advirtió que en materia impositiva existe "gran evasión y gran cantidad de exenciones que hacen que el país esté por debajo de los niveles de recaudación de la región", por lo que "es necesario comprometernos para un nuevo pacto social para aumentar la recaudación". Dicho pacto "debe procurar una estructura y una carga tributaria con mayor impacto redistributivo, uso eficiente, eficaz, transparente, sujeto a rendición de cuentas, y un Estado donde a través de la política pública se pueda garantizar un umbral de bienestar. Cuando digo que hay un paraíso fiscal de facto es porque México es un país que tributa muy poco. La carga tributaria no se eleva más allá de 11 por ciento, y por lo tanto es una carga tributaria todavía baja. En general, en la región es de 18 por ciento y México está por debajo del promedio. Por lo tanto, creemos que es importante revisar la estructura; debe haber un pacto entre todos los actores económicos, sociales y políticos para alcanzar un nivel de recaudación que sea el que se requiere para tener un Estado fuerte, que pueda otorgar los bienes públicos que la ciudadanía demanda; son vulnerabilidades estructurales que se tienen que vencer y resolver".
El diagnóstico de la secretaria ejecutiva de la Cepal es exacto, y describe una de las causas del permanente raquitismo de las finanzas públicas y, consecuentemente, de las de millones de mexicanos. Anualmente la Secretaría de Hacienda (léase el inquilino de Los Pinos en turno) presenta su presupuesto de gastos fiscales (quiénes y en qué proporción evadirán legalmente los impuestos en el periodo), y un poco más adelante su propuesta de ley de ingresos (a quiénes y en qué proporción pasarán fiscalmente a cuchillo), uno y otra siempre amenazadas por los merolicos de San Lázaro, pero nunca modificadas, porque "las condiciones cambiaron".
Un ejemplo ilustrativo del citado paraíso (documentado en este espacio en entregas anteriores): en la revisión de la Cuenta Pública 2005 (cuyo resultado se divulgó en 2007) la Auditoría Superior de la Federación detectó multimillonarias irregularidades en el otorgamiento de créditos fiscales por el gobierno foxista (cerca de 500 mil millones de pesos que no ingresaron a las arcas nacionales, producto de la enorme telaraña de amistades y complicidades entre "servidores públicos" de primer nivel y el gran capital). Enterado del asalto, el nuevo inquilino de Los Pinos ordenó "adoptar de inmediato las acciones necesarias para solventar" tan nefasta situación. La respuesta inmediata del gobierno federal, por medio de la Secretaría de Hacienda, fue publicar un acuerdo (JG-SAT-IE-3-2007) en el Diario Oficial de la Federación, para condonar "total o parcialmente" dichos créditos fiscales (casi medio billón de pesos), ergo, borrarlos de los pendientes.
¿Quiénes fueron los beneficiarios de la magnanimidad foxista y de la decidida acción calderonista, es decir, del otorgamiento y la cancelación de créditos fiscales? Sólo grandes contribuyentes. La ASF no dio nombres, pero en el registro entre otros aparecieron bancos trasnacionales, 11 ingenios azucareros, 14 consorcios de la construcción, dos televisoras, cuatro clubes de futbol, dos empresas de transporte, una empresa editorial y un partido político. La cereza de todo esto la aporta la propia Auditoría Superior de la Federación: "se detectaron contribuyentes con créditos fiscales en 2005 que obtuvieron devoluciones de impuestos por parte del SAT en el mismo año".
Entonces, no es difícil entender por qué todos los años la dupla gobierno-Congreso clava un puñal adicional a los contribuyentes cautivos; por qué aumenta y/o inventa impuestos; por qué exprime a los de siempre, con los resultados de siempre, y por qué no puede bajar la tasa del IVA. Porque los barones necesitan más cortesías.
Agárrense de donde puedan, mexicanos pasivos y pagadores, que ya viene la "actualización" (léase aumento) de los precios y tarifas del sector público, la que a su vez automáticamente provoca la "actualización" de los precios y tarifas del sector privado (el paquete no incluye "actualizaciones" salariales).
sábado, 16 de octubre de 2010
Las Alianzas Electorales.
Las "alianzas electorales" del PAN con el PRD con vistas al 2011 (y al 2012), que han suscitado amplio entusiasmo en algunos de los grupos más retardatarios de aquí y del exterior, y un amplio rechazo en los sectores democráticos de México, son antes que nada una estrategia de la ultraderecha mexicana contra el pueblo mexicano para seguirle cancelando sus derechos políticos fundamentales.
1. La estrategia perversa de las alianzas "PRD-PAN", pactada por el grupo del presidente perredista Jesús Ortega con César Nava y otros personeros de Felipe Calderón, ha buscado de entrada confundir al pueblo de México, pues quiere hacer creer que entre el PAN, que se apoderó del gobierno por la vía del fraude, y el PRD, que fue objeto del despojo, hay una unión, y que, en consecuencia, entre el PRD y Acción Nacional puede existir una propuesta común. Pero no sólo eso, sino que entre el PAN y el PRI, que defienden proyectos afines y que en los últimos años han tenido una abierta complicidad para desmantelar a la nación, habría ahora una oposición irreconciliable, lo que tampoco es cierto.
2. La convergencia dócil del PRD con el PAN busca, además, con una lógica tortuosa, blanquear la imagen del blanquiazul para convalidarlo como un partido democrático. Lo que se pretende en ese sentido es que, tras el fracaso escandaloso de los dos gobiernos panistas, muchos de los votantes perredistas, por ignorancia o por corrupción, acepten contribuir a "limpiar" la imagen del PAN y a "legitimar" la imagen de la derecha mexicana, con el argumento falaz y maniqueo de que el PRI es "la encarnación del mal" y el PAN la del "bien", sin percatarse de que lo que están haciendo es terminar con una alternativa electoral de izquierda.
3. El modelo político neoliberal, que se ha ido imponiendo al mundo entero, como sustento de una organización económica que privilegia los intereses de las grandes corporaciones por sobre los derechos de los pueblos, supone construir sistemas de partidos (de preferencia bipartidistas) en los que las distintas formaciones políticas no tengan diferencias sustanciales entre sí y avalen el modelo económico dominante plegándose a los dictados de los grandes intereses globales. Ese ha sido un objetivo de las mafias en el poder en México, en el que han estado coludidos los chuchos, y que ahora buscan acelerar: aniquilar al PRD como posible proyecto de izquierda, al no existir ya diferencias programáticas entre los tres principales partidos y carecer los mexicanos de las posibilidades de una verdadera alternancia, por lo que la estrategia de "las alianzas" PAN-PRD cumple un papel significativo en ese proceso.
4. Las "alianzas" entre partidos opuestos constituyen de esta manera un candado de seguridad para proteger los intereses dominantes, y es también con ese objetivo que los grupos mafiosos que controlan el poder económico y político en México las están impulsando. Los partidos que se alían no pueden tener una propuesta común más que en aspectos irrelevantes, pero renuncian además en esta coyuntura a esgrimir sus tesis propias que son encerradas en un cajón, acelerándose el proceso de acceso a cargos públicos… y de claudicaciones.
5. El argumento de que en casos extraordinarios es válido que partidos de izquierda se alíen con partidos de derecha democráticos para terminar con regímenes de excepción y dictatoriales es válido, pero no es el caso de México por una razón sencilla: el PAN no es un partido democrático. En 2006 el PAN instrumentó un descomunal fraude con la colaboración del PRI para robarle la elección presidencial no nada más a Andrés Manuel López Obrador sino al pueblo de México, y sus gobiernos a nivel federal y local han sido más antidemocráticos, corruptos y entreguistas que los del PRI, por lo que aliarse con los panistas con ese argumento, como lo preconizan los chuchos todos los días ante los micrófonos de Televisa, es un acto aberrante y carente de ética, contrario a los intereses del pueblo mexicano. Las alianzas del PRD con el PAN a nivel local parecieron justificarse en el pasado porque el PAN se pretendía democrático y se desconocían los "acuerdos secretos" que tenía con Salinas, pero a la luz de lo acontecido no hay justificación política ni ética alguna para ello.
6. La pretensión de los defensores de "las alianzas" de que éstas tienen como objetivo liquidar el caciquismo y la corrupción que, según insisten, serían fundamento del poder del PRI, es absolutamente mentirosa, ya que en los estados gobernados por panistas hay tanto o más narcotráfico, corrupción y caciquismo que en los gobernados por priístas, y porque además "las alianzas" PAN-PRD no tienen afinidad "con las propuestas más progresistas del país", como sostiene de manera equivocada en su extravío Marcelo Ebrard, partidario de éstas (La Jornada, 12/10/10). Baste ver que en los tres casos donde triunfaron en 2010 postularon a ex priístas, por no insistir en que en Puebla la "alianza" PAN-PRD llevó a la gubernatura al candidato de Elba Esther Gordillo.
7. El argumento de que las "alianzas" entre partidos opuestos facilitan "la gobernabilidad" al propiciar que el Legislativo deje de ser contrapeso del Ejecutivo es, por otra parte, de carácter totalitario. La clave del régimen presidencial es que el Congreso esté en manos de un partido opuesto al del Presidente, como ha sido el caso en Estados Unidos durante la mayor parte de su historia. Esta tesis aberrante la sostuvo el lunes 11 el ex rector De la Fuente, quien tras descalificar a López Obrador por su oposición a estas "alianzas", las elogió como la vía para alcanzar "mayorías estables", que según él conducen a una relación "más funcional" entre los poderes, presentándose de paso como el candidato idóneo del aliancismo y "de la sociedad civil" para 2012 (para lo que dice está hablando con los "actores políticos"), según destacaron a ocho columnas varios matutinos (Milenio Diario, 12/10/10), sin parecer darse cuenta este aspirante de que la "alianza" de conservadores y liberales en Gran Bretaña de 2010, que pone como ejemplo, es la de dos partidos de la derecha.
8. Las "alianzas" PAN-PRD fueron delineadas desde 2008 cuando el gobierno calderonista buscó imponer a Ortega al frente del PRD con la finalidad de evitar una candidatura de López Obrador en 2012. Los diferendos crecientes entre el PAN y el PRI en torno a cuál de los dos partidos correspondería la Presidencia de México, evidenciados en la "ponencia" de Carlos Salinas de Gortari al festejarse los 20 años del IFE el 12 de octubre, han llevado sin embargo al gobierno panista, aterrado ante el 2012, a presentarlas como un elemento clave para vencer al PRI: no en 2012 sino desde ahora, en 2011, y por eso busca hacer creer que se idearon para ir contra Enrique Peña Nieto, aunque en la situación actual le sean imprescindibles a Calderón para tratar de doblegar al tricolor.
9. El objetivo fundamental de dichas "alianzas" es, sin embargo, político, y busca por eso no sólo maicear y enquistar en los gobiernos locales a los chuchos sino ofrecerles todo para 2012, a fin de tratar de cerrarle a López Obrador el camino hacia Los Pinos.
10. La extrema derecha busca al aliarse con el PRD confundir a los mexicanos, lavar su imagen, terminar con una alternativa electoral de izquierda, proteger sus intereses, consolidar el régimen, alcanzar un control absoluto del poder, cimentar un presidencialismo más autoritario, liquidar a Peña Nieto y, sobre todo, cerrarle el camino a Andrés Manuel, cancelándole derechos al pueblo. Mucho, para tan mediocres actores políticos.
1. La estrategia perversa de las alianzas "PRD-PAN", pactada por el grupo del presidente perredista Jesús Ortega con César Nava y otros personeros de Felipe Calderón, ha buscado de entrada confundir al pueblo de México, pues quiere hacer creer que entre el PAN, que se apoderó del gobierno por la vía del fraude, y el PRD, que fue objeto del despojo, hay una unión, y que, en consecuencia, entre el PRD y Acción Nacional puede existir una propuesta común. Pero no sólo eso, sino que entre el PAN y el PRI, que defienden proyectos afines y que en los últimos años han tenido una abierta complicidad para desmantelar a la nación, habría ahora una oposición irreconciliable, lo que tampoco es cierto.
2. La convergencia dócil del PRD con el PAN busca, además, con una lógica tortuosa, blanquear la imagen del blanquiazul para convalidarlo como un partido democrático. Lo que se pretende en ese sentido es que, tras el fracaso escandaloso de los dos gobiernos panistas, muchos de los votantes perredistas, por ignorancia o por corrupción, acepten contribuir a "limpiar" la imagen del PAN y a "legitimar" la imagen de la derecha mexicana, con el argumento falaz y maniqueo de que el PRI es "la encarnación del mal" y el PAN la del "bien", sin percatarse de que lo que están haciendo es terminar con una alternativa electoral de izquierda.
3. El modelo político neoliberal, que se ha ido imponiendo al mundo entero, como sustento de una organización económica que privilegia los intereses de las grandes corporaciones por sobre los derechos de los pueblos, supone construir sistemas de partidos (de preferencia bipartidistas) en los que las distintas formaciones políticas no tengan diferencias sustanciales entre sí y avalen el modelo económico dominante plegándose a los dictados de los grandes intereses globales. Ese ha sido un objetivo de las mafias en el poder en México, en el que han estado coludidos los chuchos, y que ahora buscan acelerar: aniquilar al PRD como posible proyecto de izquierda, al no existir ya diferencias programáticas entre los tres principales partidos y carecer los mexicanos de las posibilidades de una verdadera alternancia, por lo que la estrategia de "las alianzas" PAN-PRD cumple un papel significativo en ese proceso.
4. Las "alianzas" entre partidos opuestos constituyen de esta manera un candado de seguridad para proteger los intereses dominantes, y es también con ese objetivo que los grupos mafiosos que controlan el poder económico y político en México las están impulsando. Los partidos que se alían no pueden tener una propuesta común más que en aspectos irrelevantes, pero renuncian además en esta coyuntura a esgrimir sus tesis propias que son encerradas en un cajón, acelerándose el proceso de acceso a cargos públicos… y de claudicaciones.
5. El argumento de que en casos extraordinarios es válido que partidos de izquierda se alíen con partidos de derecha democráticos para terminar con regímenes de excepción y dictatoriales es válido, pero no es el caso de México por una razón sencilla: el PAN no es un partido democrático. En 2006 el PAN instrumentó un descomunal fraude con la colaboración del PRI para robarle la elección presidencial no nada más a Andrés Manuel López Obrador sino al pueblo de México, y sus gobiernos a nivel federal y local han sido más antidemocráticos, corruptos y entreguistas que los del PRI, por lo que aliarse con los panistas con ese argumento, como lo preconizan los chuchos todos los días ante los micrófonos de Televisa, es un acto aberrante y carente de ética, contrario a los intereses del pueblo mexicano. Las alianzas del PRD con el PAN a nivel local parecieron justificarse en el pasado porque el PAN se pretendía democrático y se desconocían los "acuerdos secretos" que tenía con Salinas, pero a la luz de lo acontecido no hay justificación política ni ética alguna para ello.
6. La pretensión de los defensores de "las alianzas" de que éstas tienen como objetivo liquidar el caciquismo y la corrupción que, según insisten, serían fundamento del poder del PRI, es absolutamente mentirosa, ya que en los estados gobernados por panistas hay tanto o más narcotráfico, corrupción y caciquismo que en los gobernados por priístas, y porque además "las alianzas" PAN-PRD no tienen afinidad "con las propuestas más progresistas del país", como sostiene de manera equivocada en su extravío Marcelo Ebrard, partidario de éstas (La Jornada, 12/10/10). Baste ver que en los tres casos donde triunfaron en 2010 postularon a ex priístas, por no insistir en que en Puebla la "alianza" PAN-PRD llevó a la gubernatura al candidato de Elba Esther Gordillo.
7. El argumento de que las "alianzas" entre partidos opuestos facilitan "la gobernabilidad" al propiciar que el Legislativo deje de ser contrapeso del Ejecutivo es, por otra parte, de carácter totalitario. La clave del régimen presidencial es que el Congreso esté en manos de un partido opuesto al del Presidente, como ha sido el caso en Estados Unidos durante la mayor parte de su historia. Esta tesis aberrante la sostuvo el lunes 11 el ex rector De la Fuente, quien tras descalificar a López Obrador por su oposición a estas "alianzas", las elogió como la vía para alcanzar "mayorías estables", que según él conducen a una relación "más funcional" entre los poderes, presentándose de paso como el candidato idóneo del aliancismo y "de la sociedad civil" para 2012 (para lo que dice está hablando con los "actores políticos"), según destacaron a ocho columnas varios matutinos (Milenio Diario, 12/10/10), sin parecer darse cuenta este aspirante de que la "alianza" de conservadores y liberales en Gran Bretaña de 2010, que pone como ejemplo, es la de dos partidos de la derecha.
8. Las "alianzas" PAN-PRD fueron delineadas desde 2008 cuando el gobierno calderonista buscó imponer a Ortega al frente del PRD con la finalidad de evitar una candidatura de López Obrador en 2012. Los diferendos crecientes entre el PAN y el PRI en torno a cuál de los dos partidos correspondería la Presidencia de México, evidenciados en la "ponencia" de Carlos Salinas de Gortari al festejarse los 20 años del IFE el 12 de octubre, han llevado sin embargo al gobierno panista, aterrado ante el 2012, a presentarlas como un elemento clave para vencer al PRI: no en 2012 sino desde ahora, en 2011, y por eso busca hacer creer que se idearon para ir contra Enrique Peña Nieto, aunque en la situación actual le sean imprescindibles a Calderón para tratar de doblegar al tricolor.
9. El objetivo fundamental de dichas "alianzas" es, sin embargo, político, y busca por eso no sólo maicear y enquistar en los gobiernos locales a los chuchos sino ofrecerles todo para 2012, a fin de tratar de cerrarle a López Obrador el camino hacia Los Pinos.
10. La extrema derecha busca al aliarse con el PRD confundir a los mexicanos, lavar su imagen, terminar con una alternativa electoral de izquierda, proteger sus intereses, consolidar el régimen, alcanzar un control absoluto del poder, cimentar un presidencialismo más autoritario, liquidar a Peña Nieto y, sobre todo, cerrarle el camino a Andrés Manuel, cancelándole derechos al pueblo. Mucho, para tan mediocres actores políticos.
jueves, 14 de octubre de 2010
Primer juicio contra preso en Guantánamo.
Empezó en Nueva York el primer proceso civil en territorio estadounidense contra un preso de Guantánamo, en un caso que ha despertado grandes expectativas por las posibles consecuencias para la política del presidente Barack Obama.
Ahmed Khalfan Ghailani, de 36 años, compareció ante un tribunal de distrito en Manhattan, acusado de haber participado en los atentados de la red terrorista Al Qaeda contra las embajadas estadounidenses de Kenia y Tanzania en 1998, en los que murieron 224 personas. En caso de ser hallado culpable, puede ser condenado a la pena de muerte.
Se trata del primer juicio civil contra un detenido de Guantánamo desde que se abrió el centro de detención estadounidense en Cuba, en enero de 2002.
“Ghailani es culpable de conspiración para atacar las embajadas estadounidenses en Tanzania y Kenia en 1998”, señaló el fiscal Nicholas Lewin al tribunal en su declaración de apertura. “Es culpable de conspirar para asesinar estadounidenses, es culpable de asesinar a 224 personas”, agregó.
Ghailani, flanqueado por seis abogados defensores, estuvo sentado detrás del banco ocupado por el fiscal en la sala de audiencias del juez Lewis Kaplan. Vestido con un sweater beige y con pantalones oscuros, escuchó los alegatos de sus abogados.
Lewin señaló que el gobierno de Estados Unidos intenta convocar testigos y presentar documentos y evidencias de que el tanzanio, presuntamente vinculado a la red Al Qaeda, tramó los atentados con bomba contra las embajadas estadounidenses en Tanzania y Kenia, el 7 de agosto de 1998.
Lewin dijo que Ghailani y su cómplice Sheikh Swedan adquirieron una camión Nissan y explosivos un mes antes del atentado contra la embajada estadounidense en Tanzania. Un camión similar fue utilizado para el ataque simultáneo contra la embajada estadounidense en Nairobi, la capital de Kenia.
Los abogados de Ghailani urgieron al jurado a cuestionar todas las evidencias presentadas por la fiscalía. “No sólo se lo presume inocente, él es inocente”, afirmó uno de los abogados ante el jurado.
Decisivo
El proceso es considerado como un importante test para Obama. El mandatario, que hizo del cierre del campo de prisioneros en la bahía de Guantánamo uno de los grandes anuncios de los primeros días de su gobierno, quiere llevar ante tribunales civiles norteamericanos al mayor número posible de los cerca de 170 reclusos que permanecen en la base.
Ahmed Khalfan Ghailani, de 36 años, compareció ante un tribunal de distrito en Manhattan, acusado de haber participado en los atentados de la red terrorista Al Qaeda contra las embajadas estadounidenses de Kenia y Tanzania en 1998, en los que murieron 224 personas. En caso de ser hallado culpable, puede ser condenado a la pena de muerte.
Se trata del primer juicio civil contra un detenido de Guantánamo desde que se abrió el centro de detención estadounidense en Cuba, en enero de 2002.
“Ghailani es culpable de conspiración para atacar las embajadas estadounidenses en Tanzania y Kenia en 1998”, señaló el fiscal Nicholas Lewin al tribunal en su declaración de apertura. “Es culpable de conspirar para asesinar estadounidenses, es culpable de asesinar a 224 personas”, agregó.
Ghailani, flanqueado por seis abogados defensores, estuvo sentado detrás del banco ocupado por el fiscal en la sala de audiencias del juez Lewis Kaplan. Vestido con un sweater beige y con pantalones oscuros, escuchó los alegatos de sus abogados.
Lewin señaló que el gobierno de Estados Unidos intenta convocar testigos y presentar documentos y evidencias de que el tanzanio, presuntamente vinculado a la red Al Qaeda, tramó los atentados con bomba contra las embajadas estadounidenses en Tanzania y Kenia, el 7 de agosto de 1998.
Lewin dijo que Ghailani y su cómplice Sheikh Swedan adquirieron una camión Nissan y explosivos un mes antes del atentado contra la embajada estadounidense en Tanzania. Un camión similar fue utilizado para el ataque simultáneo contra la embajada estadounidense en Nairobi, la capital de Kenia.
Los abogados de Ghailani urgieron al jurado a cuestionar todas las evidencias presentadas por la fiscalía. “No sólo se lo presume inocente, él es inocente”, afirmó uno de los abogados ante el jurado.
Decisivo
El proceso es considerado como un importante test para Obama. El mandatario, que hizo del cierre del campo de prisioneros en la bahía de Guantánamo uno de los grandes anuncios de los primeros días de su gobierno, quiere llevar ante tribunales civiles norteamericanos al mayor número posible de los cerca de 170 reclusos que permanecen en la base.
martes, 12 de octubre de 2010
Medira el INEGI la Inflacion.
Transfiere Banxico medición de la inflación Información, un arma ¿política?; Banxico-INEGI ¿guerra sorda?
No hay plazo que no se cumpla y el de la medición de la inflación, está a punto de cumplirse.
Mañana, durante una ceremonia protocolaria se concretará la transferencia de los Índices de Precios del Banco de México, que encabeza Agustín Carstens, al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) que encabeza Eduardo Sojo.
Será un día histórico porque luego de 81 años de que Banxico mantuvo esa responsabilidad -desde 1929-, ahora lo transfiere al organismo autónomo especializado en estadística.
Presumiblemente, la transferencia de los índices de precios de Banxico al INEGI, permitirá una mayor transparencia.
Banco de México transferirá al INEGI la metodología y el cálculo de la inflación, como dispuso desde que se dotó de autonomía al organismo de estadística más importante de México. Del momento en que se decidió al momento en que se transferirá la medición y cálculo de la inflación, transcurrieron tres años, tiempo que se calculó como necesario para hacer el cambio.
Con este cambio se dará más transparencia a los datos y se les dotará de más confiabilidad, afirma el discurso oficial.
El INEGI toma el control de la generación de las principales estadísticas en el país, entre las que se encuentran la medición del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) y el Índice Nacional de Precios al Productor.
Para analistas especializados, la transferencia de Banxico a INEGI no será tan tersa como pudiera esperarse.
Y es que prácticamente desde que se hizo el anuncio hace tres años, el entonces gobernador del Banco de México, Guillermo Ortiz Martínez, le habría pedido a Eduardo Sojo que no se modifique la metodología para la medición de los índices.
Desde el INEGI, sin embargo, se han escuchado versiones extraoficiales en el sentido de que habrá de ampliarse la medición y que podrían difundirse otros indicadores sobre precios, en sectores rurales y urbanos, que a la fecha no se realizan.
Para los más mordaces críticos, la transferencia de la medición y cálculo de los índices inflacionarios podría convertirse en un instrumento político, en manos del gobierno panista. Para los analistas académicos, la constitución del INEGI registró un problema de origen: que tanto la designación del Presidente como los miembros de su Junta de Gobierno es potestad del Presidente de la República y difícilmente pueden ser cambiados por el Senado. El uso de la información económica puede ser utilizada como arma política, y así se ha visto en otros países.
El ejemplo más claro y reciente es el de Argentina, en donde se habría manipulado la información sobre la inflación para mejorar la imagen de Cristina Fernández de Kirchner y que finalmente le permitieron llegar a la Presidencia de su país.
Tal y como hoy se levanta y da a conocer la información sobre la inflación en México, es útil para el diseño de la política monetaria.
Hay que recordar que la política monetaria la establece el Banco de México y la aplica a través de las subastas de los Certificados de la Tesorería (Cetes) y de las tasas de interés.
Al Banco de México, su exgobernador Guillermo Ortiz Martínez le dio credibilidad y respeto a su autonomía. La credibilidad y confianza sobre la medición de la inflación tomó vuelo a partir de la gestión autónoma de un funcionario priísta: Guillermo Ortiz Martínez.
Incluso fue público el rechazo de Ortiz Martínez a la petición pública del presidente Felipe Calderón para que bajara las tasas de interés en el contexto de lo más crudo de la crisis financiera internacional reciente.
Ahora le toca a un panista, Eduardo Sojo, más allá de su marcada filiación blanquiazul, darle credibilidad a la autonomía del INEGI. Sojo tendrá que responder al interés nacional, antes que al interés partidista.
La Secretaría de Comunicaciones y Transportes, de Juan Molinar Horcasitas, rechazó las acusaciones de Grupo Iusacell que acusa a la dependencia de haber ordenado la incomunicación, tortura, vejación, mutilación, infamia, marcas, azotes, palos, arraigo, así como tormentos de cualquier especie, que inflingirán a sus representantes. La denuncia de la operadora busca, dice SCT, obstaculizar la formal conclusión de la licitación 21.
No hay plazo que no se cumpla y el de la medición de la inflación, está a punto de cumplirse.
Mañana, durante una ceremonia protocolaria se concretará la transferencia de los Índices de Precios del Banco de México, que encabeza Agustín Carstens, al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) que encabeza Eduardo Sojo.
Será un día histórico porque luego de 81 años de que Banxico mantuvo esa responsabilidad -desde 1929-, ahora lo transfiere al organismo autónomo especializado en estadística.
Presumiblemente, la transferencia de los índices de precios de Banxico al INEGI, permitirá una mayor transparencia.
Banco de México transferirá al INEGI la metodología y el cálculo de la inflación, como dispuso desde que se dotó de autonomía al organismo de estadística más importante de México. Del momento en que se decidió al momento en que se transferirá la medición y cálculo de la inflación, transcurrieron tres años, tiempo que se calculó como necesario para hacer el cambio.
Con este cambio se dará más transparencia a los datos y se les dotará de más confiabilidad, afirma el discurso oficial.
El INEGI toma el control de la generación de las principales estadísticas en el país, entre las que se encuentran la medición del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) y el Índice Nacional de Precios al Productor.
Para analistas especializados, la transferencia de Banxico a INEGI no será tan tersa como pudiera esperarse.
Y es que prácticamente desde que se hizo el anuncio hace tres años, el entonces gobernador del Banco de México, Guillermo Ortiz Martínez, le habría pedido a Eduardo Sojo que no se modifique la metodología para la medición de los índices.
Desde el INEGI, sin embargo, se han escuchado versiones extraoficiales en el sentido de que habrá de ampliarse la medición y que podrían difundirse otros indicadores sobre precios, en sectores rurales y urbanos, que a la fecha no se realizan.
Para los más mordaces críticos, la transferencia de la medición y cálculo de los índices inflacionarios podría convertirse en un instrumento político, en manos del gobierno panista. Para los analistas académicos, la constitución del INEGI registró un problema de origen: que tanto la designación del Presidente como los miembros de su Junta de Gobierno es potestad del Presidente de la República y difícilmente pueden ser cambiados por el Senado. El uso de la información económica puede ser utilizada como arma política, y así se ha visto en otros países.
El ejemplo más claro y reciente es el de Argentina, en donde se habría manipulado la información sobre la inflación para mejorar la imagen de Cristina Fernández de Kirchner y que finalmente le permitieron llegar a la Presidencia de su país.
Tal y como hoy se levanta y da a conocer la información sobre la inflación en México, es útil para el diseño de la política monetaria.
Hay que recordar que la política monetaria la establece el Banco de México y la aplica a través de las subastas de los Certificados de la Tesorería (Cetes) y de las tasas de interés.
Al Banco de México, su exgobernador Guillermo Ortiz Martínez le dio credibilidad y respeto a su autonomía. La credibilidad y confianza sobre la medición de la inflación tomó vuelo a partir de la gestión autónoma de un funcionario priísta: Guillermo Ortiz Martínez.
Incluso fue público el rechazo de Ortiz Martínez a la petición pública del presidente Felipe Calderón para que bajara las tasas de interés en el contexto de lo más crudo de la crisis financiera internacional reciente.
Ahora le toca a un panista, Eduardo Sojo, más allá de su marcada filiación blanquiazul, darle credibilidad a la autonomía del INEGI. Sojo tendrá que responder al interés nacional, antes que al interés partidista.
La Secretaría de Comunicaciones y Transportes, de Juan Molinar Horcasitas, rechazó las acusaciones de Grupo Iusacell que acusa a la dependencia de haber ordenado la incomunicación, tortura, vejación, mutilación, infamia, marcas, azotes, palos, arraigo, así como tormentos de cualquier especie, que inflingirán a sus representantes. La denuncia de la operadora busca, dice SCT, obstaculizar la formal conclusión de la licitación 21.
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