Rompiendo un foco.

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domingo, 30 de enero de 2011

El "autor intelectual" del secuestro de Fernandez de Cevallos.


En las entrevistas que dio Diego Fernández de Cevallos tras ser liberado, contó pocos detalles de los siete meses de su plagio. De sus captores no habló mucho, aunque concedió que junto con la demanda económica tenían motivos ideológicos para privarlo de la libertad. Nunca dijo que antes de ser liberado pidió por escrito que le perdonaran la pena de muerte a la que había sido condenado. El comunicado “Posdata y proemio”, firmado por la Red Global por la Transformación, dio a conocer lo anterior, y el propio Cevallos lo confirmó horas después.

Ante las pocas pistas sobre el perfil de estos secuestradores que escapan al común de los criminales que hoy torturan, mutilan, despedazan y decapitan a sus secuestrados (rasurarle la barba o no a Cevallos se convirtió en el centro de la discusión durante el cautiverio), Fernando Montiel, profesor asociado en la Universidad de Basilea, Suiza, publicó en el blog Nuestra Aparente Rendición, creado por Lolita Bosch, un ensayo en el que revisa la prosa de los documentos emitidos por los plagiarios.

Montiel afirma detectar calidades desiguales en la escritura de los llamados Misteriosos Desaparecedores. Esto lo lleva a plantear que en la redacción del documento “Epílogo de una desaparición” (difundido al ser liberado Cevallos) participaron dos personas.

Con agudeza detectivesca, Montiel disecciona estilos, ortografía, ritmo, lecturas de los secuestradores y, fundamentalmente, el pensamiento de los mismos, hasta llegar a la siguiente conclusión: los desaparecedores no son marxistas clásicos ni tampoco anarquistas, como se pensaría. Añade: “Lo que hay en realidad es la ti pología de la violencia del fundador de los Estudios de la Paz, el teórico noruego Johan Galtung, la cual se compone de tres elementos: violencia directa, violencia estructural y violencia cultural, todas presentes en la misiva de los plagiarios”.

El profesor de la universidad suiza explica: “Dicen los Misteriosos Desaparecedores: ‘Así, la violencia visible-directa, la invisible-estructural (de la que parece no haber ningún responsable) y la cultural son promovidas y sustentadas por los gobiernos…’”. Incluso el uso de los guiones asociativos (“visible-directa”, etcétera) fue tomado prácticamente de forma textual de las publicaciones del sociólogo nórdico. Y lo mismo pasa con las definiciones de cada una: tanto en el caso de la violencia cultural (“…esta difusión forma parte de la violencia cultural que promueve, legitima y justifica la violencia directa que el gobierno sostiene…”) como en el de la violencia estructural (“Sin embargo, la violencia más sofisticada… la que menos reconocemos como violencia, es la que parece no venir de ninguna persona; es la violencia estructural “invisible” presentada siempre como “estragos”, “golpes” o “crisis internacionales”). ¿La bibliografía básica? El libro de Johan Galtung Trascender y transformar: una introducción al trabajo de conflictos.

Aún faltan capítulos de esta historia. Ojalá que, mientras tanto, a raíz del ensayo de Montiel, la Procuraduría General de la República no pida a la Interpol detener a Galtung, “autor intelectual” del secuestro de Diego Fernández de Cevallos.

miércoles, 26 de enero de 2011

El retorno del profeta legal.


El estudiado tono iracundo no fue afectado por el encierro. Tampoco sus desplantes de taumaturgo escénico desaparecieron con la forzada ausencia. Menos aún amainaron los torrentes de frases contrahechas o las ideas esquemáticas para atontar bobos. Todo está en su acostumbrado lugar, sólo que ahora dejan, en la audiencia buscada, un marcado tufo de obsolescencia. El tiempo transcurrido y los cambiantes entretelones de la actualidad lo sitúan en la trastienda de la pequeña y torcida historia que le tocó representar. Aun así, Diego Fernández de Cevallos todavía hace esfuerzos mediáticos por enrolarse en la menguante corriente de la derecha nacional, bien atascada en su partido (PAN).

El reducido grupo político al que se plegó por voluntad propia pudo haber resentido su lejanía. Los locutores y comentaristas, que ya lo correteaban antes, tratan ahora de darle oxígeno de boca a boca. Quieren, por intuido acuerdo con los de mero arriba, ponerlo otra vez en pie de lucha contra sus rivales a modo: los populistas. Esos inermes molinos de viento ante su filosa verborrea. Al conjunto de la sociedad, en cambio, poco o nada le interesan sus afectadas maneras de presentarse como un campeón de la palabra empeñada, como un señor de hacienda, peones y palafreneros. Saben muy bien que siempre ocultan intenciones de leguleyo en busca de cobrar favores. Fernández de Cevallos es, en apariencia, un relicario de monerías y retóricas creencias en los auxilios divinos.

Pero su figura, visiones y conducta poco importan ya. El efecto de su hirsuta barba bien aliñada, sus cejas pintarrajeadas al carbón y ojos pispiringos amenazantes, ya no atemorizan ni siquiera a desbalagados incautos. Lo medular, y que debe ser atendido, es la estrategia que quiere desenterrar el conservadurismo retardatario cupular. Quieren, los amos de la continuidad, establecer una plataforma de ataque a la izquierda y, en especial, al personaje que, día a día, los deja a la intemperie. Fernández de Cevallos, ahora en su papel de secuestrado crédulo, inicia la andanada que, después, intentarán distintos difusores a modo convertirla en aplanadora de la izquierda.

El argumento se bifurca en etapas sucesivas. Una se concentra en glorificar a las instituciones a las que Fernández de Cevallos se une, empapado de fe, perdones y consuelo. Y cómo no lo habría de hacer, si de ellas ha sacado provecho y ventajas incontables. Cómo no lo habría de hacer, si ha sido uno de los que han usufructuado sus deformados recovecos. Cómo no habría de hacerlo, si él mismo ayudó, desde el Congreso, a sembrar las trampas y dejar intersticios para que, después, se usaran por abogados litigantes para hacer buenos negocios. Eso sí, siempre diciendo que se apega a ellas para diferenciarse del rejego (AMLO) que promete transformarlas para beneficio de los de abajo.

La otra es más profunda, la pesada, la que habrá de ramificarse para concitar el santo temor de las masas: la peligrosa retórica de la violencia. Tal y como lo dejan indeleblemente escrito y probado sus secuestradores. Esos que, de acuerdo con su versión, han copiado, que adoptaron, que calcaron, las continuas denuncias de AMLO acerca de la mafia que gobierna México. Mafia que ha causado, según AMLO, un sinfín de penas a los mexicanos y que no ceja en transitar por la senda de la inequidad social. Esos que, enloquecidos por el clasismo, inexistente según Fernández de Cevallos, llegaron hasta acusarlo de poseer una mina de diamantes en Brasil. Esos a los que el señor Calderón calificó de delincuentes comunes y donde, lo demás, afirmó tajante el panista, es puro rollo. Esos desaparecedores que lo exprimieron porque, sin tener bases ciertas aduce, le achacaron cuentas parecidas a las que hiciera el gran capitán. En fin, esos que, empapados en los rasposos juicios de AMLO, lo llevaron ante un tribunal sectario e ilegal. Esos que, incluso, lo señalan, con flamígero índice, de pertenecer, por derechos adquiridos en el trafique, como miembro distinguido de una mafia que Fernández de Cevallos asegura imaginaria, una pura y dura invención de mentes calenturientas.

El afamado panista afirmó, en respetuosa y, sin dejo alguno de duda, incisiva entrevista de afamado conductor, que escribió más de 30 cartas. Algunas, se supone, son las que mandó a sus amigos y factibles benefactores. No se conocen mayores detalles de este espinoso asunto ni se bordó sobre ello, discreción en este asunto es la consigna del oficialismo. Se supone, sin embargo, que causaron gran escozor en esa, calificada de inexistente, pléyade. Muchos de los cuales se pavonean a menudo en las celebraciones de frívolos obispos. Ahí se muestran con vistosas galas, se codean entre ellos sabedores que son los que atan y desatan en las alturas. De esta simplona manera Fernández de Cevallos deja pavimentada parte del camino para ligar, en el imaginario colectivo, la denuncia de hechos molestos (en este caso de una férrea mafia) con la ilegalidad y violencia posterior. Predicar, en la plaza pública, basado en hechos concretos y reales, documentados, se intenta catalogar de falacias lanzadas de manera irresponsable por alocados redentores. Falsos profetas de la mentira y el rencor, sostiene el profeta de la legalidad. Pero que, según muchos millones de mexicanos adicionales, son verdades duras y maduras que ya se hacen colectivamente propias. Y, lo raro de este espinoso asunto, es que por el ancho mundo se encuentran formaciones de riqueza y poder similares. Diferentes sociedades identifican a sus propias plutocracias y certifican los males que les acarrean. La crisis reciente, originada en los centros financieros del mundo desarrollado, ha obligado a reflexiones coincidentes con lo que aquí, en México, se adelantó: el uso mafioso de las instituciones por un grupo de privilegiados que buscan, como sea y se pueda, su impune prolongación al infinito.

Lo primero será demonizar, de nueva cuenta, al personaje que encabeza la revuelta de conciencias. Quién hizo el penoso esfuerzo para descubrir y adentrarse en el meollo que detiene el avance del pueblo. Las consecuencias, de triunfar en su estrategia, bien se sabe, sería la experimentada y cruenta polarización de los mexicanos.

martes, 25 de enero de 2011

El "Borrachales" de Calderon, un vulgar vende-Patrias


1. El gobierno de Felipe Calderón permitió que personal del FBI y otras agencias de seguridad de Estados Unidos interroguen a los indocumentados, principalmente centroamericanos, detenidos en México, según un nuevo cable de WikiLeaks que fue dado a conocer por el periódico español El País; hizo públicas otras cartas de la diplomacia estadounidense en las que el Ejecutivo mexicano solicitó ayuda a gobierno de Washington para apaciguar la situación de violencia en Ciudad Juárez, Chihuahua.

Se pone en antecedentes al subdirector del FBI sobre el funcionamiento de los cuerpos de inteligencia, específicamente en cuanto a las acciones para detectar a posibles miembros de organizaciones terroristas. Estados Unidos considera que la extensión de su frontera sur con México y el escaso control ejercido por la policía mexicana por el cruce de personas y mercancías lo convierte en un país adecuado para los grupos terroristas.


2. ¡Qué entreguistas gobiernos hemos tenido en México, por lo menos desde 1982! Los gobiernos del PRI de los setenta, de los sesenta, de los cincuenta y más atrás, no eran tan abyectos porque por lo menos conservaban el discurso del llamado “nacionalismo revolucionario mexicano” que servía para engañar a las masas, pero también para presionar un poco a los yanquis. No fue muy poco romper con Franco, simpatizar con Arbenz, dar asilo a Trotsky y luego a Fidel Castro, mantener relaciones con Cuba contra los deseos de la OEA, romper relaciones con Videla, con Pinochet, ayudar al sandinismo en 1978 y apoyar a los salvadoreños rebeldes, así como tener aquí a refugiados de varios países con la oposición de la derecha empresarial y los panistas. No es sencillo decir que sólo eran fintas priístas que buscaban prestigio internacional. Se necesitan más análisis para saber cómo México logró en esos años presencia mundial.


3. Era distinto “el PRI de los setenta” -como calificaban los salinistas y panistas a Cárdenas, Muñoz Ledo y López Obrador- al PRI del neoliberalismo que le abrió las puertas a la derecha panista entregándose totalmente a los brazos de Reagan, Bush, Clinton, Bush 2 y Obama. El entreguismo total de Calderón es herencia de hace casi tres décadas que seguro continuará con Peña Nieto, pero no estoy seguro que si llegara López Obrador pueda acabarlo, aunque sí hacerlo menos brutal. ¿Cómo frenar en seco esa descarada intervención yanqui en México que permite que más de 20 mil agentes de la CIA, la DEA, del FBI, de la INTERPOL, de la embajada y consulados yanquis, se dediquen a espiar teléfonos, servicios de transporte, universidades, registren a migrantes en territorio mexicano, etcétera? Seguramente AMLO tiene la llave para expulsarlos del país, pero no se lo hemos escuchado en ninguno de sus discursos.


4. No es necesario, además casi imposible, romper relaciones diplomáticas con el gobierno yanqui por su descarado intervencionismo en el país; pero sí es indispensable dejar muy claro con ellos las relaciones que se mantienen. No es un secreto que durante la crisis de 1981-82 del petróleo y luego del “saqueo” que denunció mordiéndose la lengua López Portillo, los yanquis –con Reagan en la Presidencia- aprovecharon todo para meterse hasta la cocina: Silva Herzog, nuevo secretario de Hacienda, por órdenes del presidente electo De la Madrid firmó con Estados Unidos y el Fondo Monetario Internacional un “Programa de austeridad” que se convirtió en una cadena para la aplicación de políticas económicas y del presupuesto anual de México; tampoco es un secreto que De la Madrid declaró que había que devolverle a la sociedad (igual iniciativa privada) lo que el Estado le había quitado. Fue la aceptación total, abierta, de la imposición del neoliberalismo y la privatización sin contemplación.


5. Fue cuando el entonces priísta Muñoz Ledo y muchos de los articulistas después, denunciamos que se trataba de “otro proyecto económico de nación”. Salió al quite Angel Gurría (¿secretario de Relaciones?) y respondió burlándose de nosotros diciendo que no se trataba de un sexenio sino de 25 años o más en que el Estado cedería su lugar a la iniciativa privada. Con Calderón se cumplirían 30 años del más abierto y acendrado neoliberalismo privatizador y Gurría –que fue previsor- es hoy un funcionario internacional al servicio de los Estados Unidos. El neoliberalismo fue un proyecto económico y político transnacional que nació con la Thatcher y Reagan y se extendió en todo el mundo; llevó a la firma de Tratados de Libre Comercio que llevaron a una mayor concentración de la riqueza en unas cuantas manos y al más grande empobrecimiento de la mayoría de la población. Hubo muchas reacciones en contra, pero hasta ahora poco se pudo hacer contra él.


6. Llegó entonces el discurso del “mundo global”, de la “integración mundial”, de la “globalización”, que buscó encubrir lo que nosotros llamamos desde el fin de la Segunda Guerra: “imperialismo”, que al mismo tiempo se había hecho presente en el mundo desde fines del siglo XIX. La misma gata, nada nuevo, sólo que cien años después; pero ahora con el fin de integrar a más países alejando la idea de uno o dos imperios. Se alejó en el mundo la idea de las batallas antiimperialistas y nacionalistas puesto que existía un mundo global que cada día integraba a los demás países. Antes de la aparición del neoliberalismo y la “economía global” se reunían los “Cuatro Grandes” (Estados Unidos, Inglaterra, Francia y Rusia o la URSS) que se encargaban de discutir los asuntos del mundo; hoy se habla del Grupo de los ocho, del Grupo de los 20, del BRIC, etcétera, dando a entender que se ha ampliado el número de países que dominan.


7. Al parecer fue esa estrategia de ampliar el número de países en la cúspide de la pirámide de dominación, de eliminar la idea de que los Estados Unidos fue durante un siglo el casi único país imperialista; ello parece haber dispersado más la idea de que el enemigo principal eran los imperialistas yanquis, de lo que ahora casi no se habla. El imperio yanqui-ruso que dominaba el mundo parece haber desaparecido y sustituidos por Estados Unidos, China-India, el Mercomún, Japón, Rusia y sólo después Alemania, Francia e Inglaterra, incluso se acerca Brasil. El enemigo real, los Estados Unidos, se perdió entre tantos aspirantes a la dominación mundial. ¡Qué buena estrategia para engañar al mundo! ¿Se olvida acaso que el presidente Salinas incluso mandó a hacer una gran ceremonia por televisión en cadena nacional para anunciar que México había pasado del tercer al primer mundo? ¿Quedará algún rincón de la economía de México que aún no haya sido entregado a los yanquis?.

viernes, 21 de enero de 2011

La publicidad desmedida del "Chapo Guzman".


1. En México los medios de información ganan mucho dinero en venta de publicidad hablando todo el día de narcotráfico, de las muertes “por juego cruzado” (van 40 mil) y de la inseguridad. Las primeras notas del día y las últimas de la noche son sobre las hazañas del gobierno y de los narcos en la guerra por el control de plazas.

Son notas con decenas de millones de radioescuchas y televidentes “bien educados” para ver “la nota roja”, así como en las notas deportivas y las telenovelas; pero además con la paciencia para ver toda la publicidad que paga. Los periódicos que más venden, la radio que se escucha y los canales que más se ven son los que esencialmente se dedican a difundir ese tipo de programas que entretienen, pero también embrutecen. Nadie nace con un tipo de educación o pensamiento, sino que éste se adquiere a través de la vida y quienes son los encargados de propagarlo son principalmente los medios de información.


2. El Chapo es conocido en México y en el mundo como gente “súper mala” por tener el título de narcotraficante, título aún no registrado en la academia; pero con dinero (como uno de los personajes multimillonarios de la lista de Forbes) se puede convertir en una persona “súper buena”, tal como muchos gobernantes y empresarios que realizan obras sociales con “dinero sucio”. En última instancia todo lo que nos rodea es “de acuerdo con el cristal con que se mira”. Pienso que la Comisión Electoral del IFE no podrá aceptar su inscripción como candidato “porque es un delincuente”; pero él y sus abogados podrían argumentar que han habido muchos empresarios, funcionarios, hasta presidentes, del mismo título; y, tan peligroso podría ser El chapo para sus socios en este campo, que podría dar la lista de sus colegas a Wikeleaks para su publicación. ¿O piensa alguien que de las sumas millonarias de las campañas es poco el “dinero sucio”?


3. La clase política en México, así como el gobierno de Calderón, está tan devaluada que nadie cree que el gobierno esté combatiendo en serio a la llamada delincuencia. Se observa que sólo es un pretexto para mantener al ejército en las calles y tener vigilado el país para evitar cualquier levantamiento de descontento. Después de más de cuatro años de guerra, que ha provocado 40 mil muertes, un enorme sector de la población exige que se regrese al ejército a sus cuarteles. A veces se argumenta que tras toda la guerra y la enorme publicidad, se encuentra un acuerdo para esperar que Calderón concluya su sexenio sin tener que renunciar. Por eso se pregunta: ¿cuántos candidatos plenamente ligados al narco buscarán ahora penetrar más en la clase política? Por eso pareciera que con tanta publicidad de El Chapo y la preferencia que tiene el presidente Calderón por el cártel del occidente con centro en Sinaloa, pudiera ser candidato.
4. Alguien preguntaría: ¿Por qué se asustan los mexicanos en que llegara El chapo a ser presidente si los han gobernado delincuentes, incapaces, asesinos, defraudadores y sus protectores, payasos, devaluadores, entreguistas, etcétera? ¿No son acaso los presidentes y sus secretarios de Estado los que más muestras de corrupción han enseñado a través de la historia? Si alguien se dedicara a investigar en serio la corrupción presidencial en México y no sólo de los casinos de Calles, de ciudad Satélite de Alemán, el Cancún de Echeverría, del despilfarro y riquezas de López Portillo, de los gigantescos de desfalcos de los Salinas, del enriquecimiento familiar de Fox y de los propiedades que empiezan a aparecer de Calderón, tendríamos en que ningún presidente o alto funcionario podría salvarse del título de delincuente. Es el título más honroso de los grandes funcionarios mexicanos, entonces, ¿Por qué El chapo no podría ser candidato y presidente?


5. El chapo -propagan ampliamente los medios- tiene el control del 80 por ciento del narcotráfico en México y en estos días nos hemos enterado de que ha penetrado en decenas de países de Latinoamérica. Más aún, los más profundos investigadores en este campo, analizando el número de narcos encarcelados y muertos por el ejército- aseguran que el gobierno de Calderón mientras protege al sector de El chapo que controla Sinaloa y la región del pacífico mexicano, persigue a los enemigos de El chapo que controlan el sector del Golfo de México. Se puede decir que El chapo es de filiación panista porque se fugó durante el gobierno panista de Fox y ahora es protegido por el gobierno panista de Calderón. Quizá esa militancia ha hecho que se hable de la posibilidad de su candidatura. ¿Se imaginan cuántos millones de votos podría comprar con su dinero, cuántos regalos y chambas podría repartir para ganar voluntades?


6. En México, como sucedió en Colombia y otros lugares, los narcotraficantes cuentan con una amplia base social porque reparten “ganancias”, cosa que no hacen empresarios y políticos. Han hecho tanta campaña por su causa de Robin Hood o “Chucho el roto”, que los campesinos y los más miserables los protegen del gobierno y cuando mueren algunos son convertidos en “santos”, tales como Valverde, Gaviria, Nazario, La tuta. La realidad es que es muy grave que en México se esté pensando en que El chapo –siendo conocido como un capo internacional- pudiera ser presidente o alto funcionario; pero luego se olvida que en México ha habido presidentes peores. ¿Qué hacer para garantizar que México no siga siendo gobernado por delincuentes de larga carrera política? ¿Se necesitan sólo cambiar las leyes sin que la población tuviera conciencia? O es precisamente lo contrario: que la población cambie las leyes a partir de su conciencia.


7. Tan desprestigiada ha sido la política que han enseñado en México el PAN y el PRI que cualquier locura cabe. Pareciera que a nadie le importa que sexenio tras sexenio el país sufra condiciones cada vez más desastrosas: que la producción sea muy inferior, que el desempleo crezca, que los servicios de salud y educación sean cada vez más deficientes, que la población tenga que migrar y que la pobreza y la miseria estén llevando a más muertes por desnutrición y enfermedades curables. Hay una minoría que con sus negocios obtiene gigantescas ganancias y que cuenta con altos ingresos; esa minoría es la que se opone con sangre y fuego a las transformaciones sociales. Desde siempre los empresarios y políticos se han quedado con las riquezas del país, pero en los últimos 25 años la situación se ha agravado; a tal grado que hoy cualquiera puede adueñarse del gobierno y del poder y hasta gobernar seis años. ¡Qué jodidos estamos!.

miércoles, 19 de enero de 2011

Mientras mas luchamos contra la cacique Gordillo, mas poderosa para el p.a.n. y el p.r.i. se hace.


1. Leo: “El Partido Nueva Alianza (Panal), de Elba Esther Gordillo, aprovecha el espacio público en el interior de las escuelas para repartir, con la complicidad de directivos, maestros y la estructura sindical del magisterio, miles de cuadernillos, loncheras y mochilas con propaganda electoral de ese organismo político, los cuales son entregados a niños desde tres años de edad, en preescolar, hasta adolescentes de 15, en secundaria. Así, los escolares son utilizados como vehículo para llevar el mensaje político de los candidatos y obtener los datos confidenciales de sus padres”. Yo digo: repetir mil un veces que la cacique Gordillo viola las leyes -en este México donde nunca se han respetado porque siempre han estado subordinadas a la fuerza- es como un lloriqueo, una manifestación de debilidad que nunca hemos podido superar. ¿Hasta cuándo seremos fuertes para que de los desahogos pasemos a los bloqueos?.

2. Hace ya mucho tiempo que comprendí que las denuncias sirven para abrir los ojos y los oídos a la gente, pero ya de tanto repetirlas, la gente se bloquea y no escucha. Parece que la misma gente nos exige que pasemos a las acciones bien planeadas y difundidas para poner remedio a la situación. Lo que ha sucedido es que en lugar de realizar actos masivos contra la Gordillo suele encantarnos decir que es fea, horrible, que se parece a la mamá de Chuky, que es ladrona y asesina. Pero se olvida que es la mamá de Calderón, de los priístas, de los de Nueva Alianza, de los charros que controlan el SNTE, de directores generales, de gobernadores, de legisladores, que domina totalmente en la SEP y en parte a la FSTSE, etcétera. Pero sin Gordillo no ganaba Calderón del PAN y sin Gordillo tampoco podrá irle bien a Peña Nieto del PRI. Mientras los profesores de la CNTE se consolidan hay que perseguir y atosigar a la cacique que lo controla todo.


3. La cacique del SNTE tiene a su servicio alrededor de 10 mil profesores “liberados del trabajo” (comisionados) para usarlos en campañas políticas del PRI, luego del PAN y en los próximos meses nuevamente del PRI. Muchos tontitos, o tontotes, creen que Gordillo no informa a la SEP ni a la Presidencia de la República, cuando en este país no se mueve ninguna hoja sin que el aparato de poder sea el primero en enterarse. ¿Quiénes hicieron la campaña presidencial de Calderón en todo el país, organizaron y cuidaron las casillas electorales, contabilizaron los votos y llenaron las actas sino los ilustres profesores comisionados por la Gordillo? ¿Quiénes se encargarán de hacer lo mismo para el candidato del PRI, Peña Nieto o Beltrones? En este momento la Gordillo quizá es más fuerte que Calderón y Lujambio juntos y en los meses próximos mucho más. La Gordillo no es la mamá de Chuky sino la mamá (por no decir el papá) de todos los políticos.


4. Así que si sus huestes van a las escuelas repartir propaganda de Nueva Alianza y del PRI, ¿algún tontito piensa que la van a sancionar cuando todo el aparato de poder está agradecido por ella e incluso se arrodilla para agradecerle sus favores? Llevamos en la CNTE 30 años luchando contra el charrismo, la traición sindical y, desde 1989, contra el caciquismo de la Gordillo; en vez de debilitarla parece que le inyectamos vitaminas para lograr más poder dentro de la clase dominante. La CNTE ha realizado -mucho más que cualquier organización en México- más de dos mil manifestaciones, plantones y bloqueos; sin embargo su crecimiento se ha estancado, pues domina sólo ocho secciones sindicales y crece a paso de tortuga. Nos tocó luchar contra un enemigo muy poderoso (El SNTE) porque es parte importante del Estado opresor. Millón y medio de profesores, con enorme presencia entre campesinos y ciudadanos de todo el país, es una fuerza social envidiable.


5. ¿Puede alguien imaginarse el gran poder que tendrían los profesores en el país entre los campesinos y demás trabajadores si tuvieran una conciencia clasista, es decir, que supieran distinguir entre la burguesía que los domina ideológica y políticamente, y sus intereses como profesores que son los del mismo pueblo? El 90 por ciento de los profesores tiene su origen social entre los campesinos, las clases medias bajas citadinas y entre las mismas familias de profesores. No solo no comprenden su papel de “correa de transmisión de la ideología de la clase dominante”, del llamado “currículum oculto” que la burguesía esconde, sino que muchas veces olvidan los profesores que -por clase social- pertenecen a la escuela pública, gratuita, laica, popular, pero muchos de sus hijos están en escuelas privadas por la enorme propaganda favorable que éstas realizan. Es indudable que los profesores han sido víctimas de un engaño total.


6. Lo que ha fortalecido a la Gordillo no solamente ha sido su habilidad sino también la gran cantidad de prestaciones que maneja (préstamos a corto plazo, hipotecarios, reparto de viviendas, automóviles, dinero del Estado, etcétera) y los miles de millones de pesos de que dispone de la institución sindical. La lucha contra Gordillo tiene que ser una lucha de masas, pero también usando una estrategia de acoso en sus participaciones públicas. No olvido que Fox fue obligado en parte a retirar el desafuero contra López Obrador porque “le hicieron la vida imposible”; ya no se podía parar en ningún lugar sin que fuera boicoteado y ridiculizado. ¿Por qué no investigar cuáles son los puntos más débiles del charrismo, sus centros de reuniones, sus viajes y demás para boicotearlos. Pero además, parece que los medios de información en lugar de apoyar las luchas de los trabajadores hoy podrían dedicarse a calumniarlos para desprestigiarlos.


7. Ésta cacique sindical hace y deshace a su antojo. En las secciones sindicales donde no tiene mayoría simplemente no convoca asambleas, congresos o elecciones; si hace congreso porque la presionan organiza entre la minoría un comité y desconoce a la mayoría (como pasó en la sección IX y otras secciones), o bien nombra a una comisión ejecutiva para representarla mientras destruye a la oposición. En ocho secciones se la ha pelado pero no ha descansado boiconteándolas y negándoles las cuotas sindicales. Este año tiene que ser el definitivo para Esther Gordillo, pero para ello hay que inventar estrategias movilizadoras fuertes, permanentes y, sobre todo, unitarias. ¡Ninguna negociación con ella porque ha demostrado ser un personaje funesto que reprime sin piedad y compra a los dirigentes que se ponen en venta. Ya basta de quejarnos de que la burguesía es mala porque defiende su poder. Hay que buscar como quitárselo, no hay de otra.